Tú no eres el conejito

Así como la historia del mundo se divide en un antes y un después, así tú. Es como si tuvieras dos personas dentro, quizá en relidad siempre fuiste éste y antes mentías. Descubrir que me estafaste, que tenías novia, que comentabas lo que yo te decía con mi "amiga" ha sido duro por que tú no eras así. Al menos no el conejito.


El Conejito era un hombre, una persona sincera, honesta, sensible, por eso me enamoré de él. Por eso lo esperé tantos meses, con ilusión, por eso le di tiempo a "sanar las heridas" porque pensaba que las había y porque pesaba que valía la pena. Pero tú no eres es Conejito. Él jamás me hubiera mandado a volar por correo electrónico, jamás se me hubiera desaparecido, no me hubiera lastimado, por que él hablaba con la verdad, el me miraba con afecto. El Conejo no hubiera creido mentiras porque me conocía, porque sabía que yo lo quería. Ese Conejo era un hombre seguro de sí mismo, exitoso, que sabía lo que quería. Tú eres un niño, que pretexto cosas absurdas, que huye, que miente y que engaña. También estafa.

Yo amaba la Conejo, él y yo teníamos química, nos sonreíamos con una mirada. Él tenía ojos de sol y luz en la mirada. Era el perfecto hombre que toda mujer querría tener, incluso yo. El problema es que el Conejo no existe. Tú no eres él. Él está muerto.

Soy una mujer en construcción

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